Acerca de la Ericipela
La erisipela es una enfermedad infecciosa aguda, y contagiosa de la piel, producida por un germen del tipo estreptococo hemolítico. La erisipela penetra a
través de una puerta de entrada, que puede ser una simple herida, fisura o úlcera. o a través del ombligo en el recién nacido. Otras veces la puerta de entrada está oculta (por ejemplo una herida de la mucosa de la boca, de la nariz, etc), en cuyo caso se habla de
erisipela médica o espontánea, que generalmente se presenta en la cara, en contraposición a las anteriores, que se denominan
erisipelas quirúrgicas.
Esta enfermedad produce una dermitis y ocasionalmente afecta a los órganos profundos, acompañándose de trastornos generales y fiebre. Generalmente se presenta como una enfermedad inflamatoria, circunscrita casi siempre a la cara.
Predisponen a la erisipela el alcoholismo, la diabetes y la menstruación, existiendo mujeres que presentan brotes de erisipela, coincidiendo con las reglas.
Sintomas
Suele comenzar de repente, con fiebre, escalofríos, náuseas y vómitos, dolor de cabeza intenso, pulso rápido, orina escasa, lengua seca y saburral y a las 12 o 24 horas, aparece la típica placa erisipelatosa, que presenta los signos característicos de la inflamación y está limitada por un "rodete", lo que la diferencia de una placa de linfaringitis, que emite prolongaciones en forma de llamaradas. Crece rápidamente y se suele localizar en la cara, alrededor de los orificios naturales: boca, nariz, ojos, etc, acompañándose de la inflamación de un ganglio del cuello ; al cabo de una semana, ceden las manifestaciones y la placa se descama en forma de pequeñas y delgadas laminillas o en forma de polvo fino.
Los casos de erisipela grave, se inician por la presencia de zonas bien limitadas de color rojo vivo intenso, con hinchazón a su alrededor y un reborde bien limitado, indurado, elevado e invasor, pudiéndose presentar o no vesículas en su superficie; a medida que la erisipela progresa, las lesiones cambian el color rojo intenso por el castaño y descamándose posteriormente. Se presenta preferentemente en la cara.
Tratamiento
El tratamiento recetado por el médico para la erisipela se basa en la administración de antibióticos, tales como penicilina o amoxicilina.